Entrevista
con José Millet, filólogo e investigador
sociocultural, a propósito de 217 años de insurrección
***A esos mártires, cuyos nombres no aparecen en ningún monumento
conmemorativo y cuyos rostros han permanecido ocultos durante más de doscientos
años, a José Caridad González y sus compañeros de gesta, héroes anónimos de
nuestro pueblo, ayer sufrido y hoy redimido para siempre, les llegó la hora de
entrar al altar de Patria, forjada con su sangre inocente y el sacrifico de sus
vidas.
José Millet |
(Joel Chirinos - Prensa INCUDEF - 11 de mayo del 2012)
La
insurrección ocurrida el 10 de mayo de 1795, en la parte montañosa de Coro, más
que una rebelión de negros esclavos liderada por algunos cabecillas de color
denominados los libres, integrados por mestizos, zambos, mulatos y africanos
antes esclavizados que habían alcanzado su libertad por diversos medios, fue en
realidad una lucha contra la explotación y la generación de irreconciliables
injusticias.
Visto
como persona perversa y traidora por la colonia española, asentando
injustamente este antecedente para ocultar sus cualidades de luchador
revolucionario, líder social y héroe de la lucha de liberación frente a la
esclavitud, la historia hurgada por el investigador y filólogo José Millet, nos
presenta a José Caridad González: líder social curazoleño de origen Luango
asesinado durante la insurrección armada de Coro el 12 de mayo de 1795.
¿Quién fue José
Caridad González?
José
Caridad fue un héroe curazoleño de origen étnico luango o loango, que se
atrevió a desafiar, en la década de 1770, a la corte española, reclamando el
derecho de sus compañeros de nación a las tierras en las que habían laborado
pacíficamente durante largo tiempo y de las cuales pretendían despojarlos
testaferros al servicio de los terratenientes, miembros de la godarria coriana,
en conchupancia con Manuel Carrera, representante entonces del Rey en Coro en
su condición de Justicia Mayor.
¿Por qué la historia
de la gesta libertaria no menciona a este hombre?
Un
largo silencio condenó al olvido a seres humildes, actores principales de
aquella gesta, africanos sometidos a la afrenta lesa humanidad del sistema
esclavista. Entre ellos se encuentra José Caridad González y sus aguerridos
compañeros, perseguidos, expropiados de sus tierras y escasos bienes,
expatriados de sus asentamientos serranos de Macuquita, La Chapa y sitios
aledaños, encarcelados sin juicio ni pruebas en Puerto Cabello o condenados a
servir en condición de esclavos en las bajeles de la Armada de Su Majestad el
Rey de España, a ración y grillete, para luego de haber sufrido tales
infamantes suplicios, finalmente, quienes lograron sobrevivir, ser declarados
inocentes.
¿Cuál fue su papel en
la gesta libertaria del 10 de mayo de 1795?
Hay
que referir el rol político de este líder curazoleño en su condición de
referente de un proceso de luchas sociales, enfrentado a los pocos, pero
poderosos, terratenientes de La Sierra coriana. A su condición de héroe se unió
el continuo bregar reivindicativo frente a los de la restante población
desposeída y humilde de la capital de la región, con la que se involucraría en
la organización de la insurrección en esta localidad urbana y más a allá de
ella. Es lo que explica que él haya sido detenido y encarcelado junto con sus
lugartenientes, el mismo día en que llega la noticia de la insurrección de la
hacienda de Macanillas, y que, al día siguiente, hayan sido ejecutados, sumariamente,
en la Plaza Mayor de Coro bajo el pretexto de intento de huída cuando eran conducidos
a la cárcel, explicación dada por las autoridades españolas para justificar tan
abominable hecho y que nos hemos encargado de
desmentir basado en la documentación histórica generada en los procesos
jurídicos seguidos a los sobrevivientes, heridos y demás población relacionada
con los alzados.
¿Puede ser
considerado José Caridad líder principal de la insurrección de mayo?
Las
autoridades españolas que lo juzgaron consideraron como la causa principal de
su condena la influencia o efecto pernicioso ejercido sobre los negros libres.
Uno de los testimonios analíticos que sirve de soporte fundamental para tal
juicio lo elabora Manuel Carrera, quien fuera Justica Mayor en la fecha 1774,
en que uno de aquellos “libres” se destacó en la palestra de la sociedad
colonial como quien se atrevió a desafiar el poder de la “godarria coriana” con
sus reclamos sociales en nombre de sus compañeros de nación Luanga: responde al
nombre de Josef Charidad. Con el influjo ideológico e intelectual de José
Caridad, la insurrección fue encabezada por José Leonardo Chirino.
¿Hablamos de un
hombre culto y letrado o un indocto peón rudimentario?
José
Caridad escapó muy joven de Curazao y se estableció en Coro, donde su genio
vivaz, intrépido, ágil y activo le proporcionó la subsistencia en varios
oficios y ocupaciones. Fuentes documentales dan fe de su excepcional capacidad
intelectual. Logró apropiarse de varias lenguas habladas por los miembros de
los Imperios que dominaban el Caribe. Llegó a dominar el idioma español y
asimismo el ki-luango, lengua natural loango hablada por los africanos traídos
de una parte del antiguo Reino del Congo. El perfil del políglota lo obtenemos
al enterarnos que dominaba el papiamento o jergón de Curazao y alguna tintura
del francés.
Finalmente, a manera de reflexión, Millet aportó
que la matanza de los insurrectos fue una reacción normal del Poder de España
frente a acciones violentas de sublevación, pero también formó parte de un plan
en el que hay que inscribir el secuestro, encarcelamiento y ulterior asesinato
de luchadores sociales, como los inocentes que fueron asesinados durante la
escaramuza del día 12, cuando fueron decapitados en la plaza pública de Coro 24
aprehendidos, heridos y aturdidos, en cuyo contexto de tarde sangrienta fue
asesinado el curazoleño objeto de nuestra presentación y algunos de sus
compañeros de origen luango.
No hay comentarios:
Publicar un comentario